5. REMOLQUES CARISIMOS

 

Ya nos han enseñado a lanzar un may day, y nos han dicho que es obligatorio salvar la vida humana en el mar. Pero no está de más recordar a los armadores de los barcos deportivos que si se pide remolque, el barco que nos entre a puerto puede exigir un alto precio por el rescate y remolque de la embarcación, proporcional al coste de nuestro barco. Recordemos que una cosa es estar hundiéndonos y que nos rescaten, algo por lo que no nos van a cobrar ni una peseta, y otra muy distinta es perderse, a causa de una incorrecta navegación, o ponerse nervioso y perder el control ante una pequeña avería.

Normalmente a nadie le cuesta nada remolcar al barco del novato que se ha quedado sin gasolina a una milla de la bocana, o dar un cabo a una embarcación menor con problemas. Pero si pedimos que nos remolquen una buena distancia hemos de negociar con el patrón o capitán del remolcador si nos va a cobrar y cuánto, derecho que se nos puede exigir al llegar a puerto, sobre todo en puertos extranjeros.